Comunicarse con su bebé

Oír que su hijo dice su primera palabra es uno de los mayores hitos de un padre. Ser capaz de hablar con él y mantener una conversación es el comienzo de un gran viaje juntos. Pero, en realidad, usted empieza a comunicarse con su bebé desde antes de su nacimiento, y a través de una gran variedad de métodos no verbales.

Cómo comunicarse con su bebé

Las miradas, acciones, caricias y hasta las canciones que se reproducen cerca a a su pequeño le pueden decir todo lo que necesita saber. Del mismo modo, al aprender a leer el lenguaje corporal y las señales de su bebé, usted descubrirá que esta pequeña persona es bastante habladora, incluso mucho antes de que él tenga el poder de la palabra.

Los bebés necesitan sentirse comprendidos, y es vital que sus formas de expresar sus necesidades y emociones sean reconocidas. «Echen un vistazo a sus señales no verbales», dice Vivien Sabel, psicoterapeuta y autor del libro El método Blossom. «Al darse cuenta de sus patrones, usted puede tratar de satisfacer sus necesidades antes de que él llegue a la etapa de llorar.»

Una vez que ha reconocido que cuando su bebé tiene la lengua fuera significa que tiene hambre, y que los ojos brillantes indican alegría, comience a imitar a sus señales y ver cómo responde. «Cuando su bebé le mire y empiece a sacarle la lengua, usted deberá debe seguir su ejemplo», explica Vivien. «Al reflejar de vuelta su acción, usted le estará diciendo, ‘yo se lo que estás diciendo». De esta manera, usted podrá comunicarse con su bebé de una manera mucho más efectiva y clara.

Incluso antes de nacer, el bebé puede escuchar el mundo que le rodea. De hecho, alrededor de cinco semanas antes del nacimiento, su cóclea (la parte del oído que convierte los sonidos en mensajes eléctricos para el cerebro) se habrá desarrollado lo suficiente como para percibir los sonidos del habla. Esto significa que usted puede establecer una comunicación y un vínculo con él mientras está todavía en el útero.

Los gestos siempre han sido una parte fundamental de la comunicación humana y, como las habilidades motoras de su bebé se desarrollan más rápido que su discurso, naturalmente adoptará signos físicos, como señalar y levantar los brazos para decirle lo que él necesita.

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